Hace casi dos semanas que no hay movimiento en las aulas debido a la crítica situación sanitaria frente a la pandemia de coronavirus. Ante las restricciones vigentes, una maestra rosarina salió a dar clases a la vereda frente a su casa para acompañar a las familias del barrio y ayudar a los chicos y chicas. María del Lujan, comenzó a realizar clases improvisadas en la vereda de su casa y con un pequeño pizarrón. En dialogó con Eric Tropper en Mal pero Contentos explicó como surgió la idea: “Soy docente en la escuela 1337, Silvestre Begnis, en Barrio Acindar. Nosotros hace dos semanas que no tenemos que ir al colegio por el decreto. Tenemos un grupo acá en la cuadra que desde que empezó la pandemia salíamos siempre a las 9 de la noche, con barbijo y bandera cantábamos el himno y nadie se fue de los vecinos”. Continuó: “Yo antes daba particular en casa pero ahora por motivos personales ya no puedo hacer entrar a los chicos por precaución”. Agregó: “Como vi tan preocupadas a las madres se me ocurrió, implementar una clase diaria en la vereda, con barbijo bien abrigado, se trajeron un cuadernito borrador. Entonces ellos mismos me iban diciendo cuales eran las dificultades que tenían”. Aclaró: “Ayer fue el primer día, hoy también a las 3 de las tardes y ver si se van a ir sumando mas”.