Luis Carzoglio está suspendido en el cargo desde 2019 y será juzgado por casos que se remontan a 2009. Denunció pública y penalmente a ex agentes de inteligencia durante el gobierno de Mauricio Macri.
El juicio político contra el juez de Garantías de Avellaneda Luis Carzoglio, quien en 2018 rechazó la detención del sindicalista camionero Pablo Moyano en una causa por administración fraudulenta en el Club Atlético Independiente, comenzará esta mañana en el Anexo de la Cámara de Senadores de la Provincia de Buenos Aires, en la ciudad de La Plata.
Carzoglio está suspendido en el cargo desde hace casi cuatro años y será juzgado por hechos diferentes a la Causa Moyano, algunos de los cuales se remontan a 2009.
Las audiencias se extenderán hasta el próximo viernes, durante las cuales está previsto que declaren unos 85 testigos, 55 de los cuales fueron propuestos por la defensa del magistrado suspendido, encabezada por el abogado Diego Raidán.
Las instancias del juicio político serán transmitidas en directo por Youtube (https://www.youtube.com/@enjuiciamientodemagistrado1594).
Luego de la ronda de testigos, el Jury –integrado por abogados, juristas y cinco legisladores (tres de la oposición y dos del oficialismo)– tendrá lugar la etapa de alegatos y la posibilidad de que Carzoglio pronuncie sus últimas palabras antes de la decisión final.
El tribunal dispone de cinco días para dar a conocer su veredicto y fundamentos.
El juez Carzoglio adelantó que declarará durante el debate para “refutar todas las acusaciones”.
Carzoglio denunció pública y judicialmente que, durante el Gobierno de Mauricio Macri, dos agentes jerárquicos de la AFI, Rubén Di Pasquale y Juan Sebastián De Stéfano, se apersonaron en su despacho para pedirle la detención de los Moyano.
Incluso le entregaron un borrador de la resolución que debía firmar, que fue aportada a la investigación judicial.
Di Pasquale y De Stéfano –designados durante la gestión de los jefes de la AFI de Cambiemos Gustavo Arribas y Silvia Majdalani- reconocieron la visita pero negaron el carácter que le atribuyó Carzoglio, y el juez federal Ariel Lijo los sobreseyó.