Pinturas de Canaletto, Tiepolo, Guardi y Giampietrino, entre otros, fueron restituidas luego de perderse tras la quiebra de una familia de coleccionistas
Las autoridades italianas han recuperado una veintena de pinturas de artistas renacentistas y barrocos, entre ellos Canaletto, Bonifacio Veronese y Giampietrino, que se perdieron tras la bancarrota de una familia en Venecia (norte de Italia) y llegaron a lugares tan distantes como Nueva York.
La unidad de protección del patrimonio cultural de los Carabineros italianos anunció este miércoles que, tras meses de búsqueda, había conseguido reunir esa colección, de “importante valor histórico y económico”, según un comunicado.
En total son 24 pinturas que Canaletto, Tiepolo, Guardi, Giampietrino, Padovanino, Diziani, Zais, Fontebasso y Bonifacio Veronese realizaron entre los siglos XV y XVIII, pero que se perdieron tras la quiebra de una familia de coleccionistas.
Las obras estaban repartidas por toda Italia e inclusa algunas permanecían escondidas entre muros de viviendas particulares o en almacenes de ciudades como Venecia, Padua, Florencia, Génova y Treviso. Pero además, un cuadro de Giampietrino (1480-1553), que representaba a la “Magdalena penitente”, fue interceptado en una galería de arte de Nueva York, donde estaba a punto de ser vendido a una importante institución museística china.
El conjunto recuperado por las autoridades se entregó al Ministerio de Cultura italiano, que impedirá la exportación de siete pinturas declaradas de “gran interés cultural” mientras que el resto podrán ser subastadas.
Dos de esas obras, Matrimonio mistico di Santa Caterina d’Alessandria ed Estasi di Santa Teresa de Francesco Fontebasso (1707-1769) y La dichiarazione de Bonifacio Veronese (1487-1553), se exponen desde hoy en la Galería de la Academia de Venecia.