El diputado Eduardo Toniolli analizó en el programa La Barra de Casal la presentación que realizó el jefe de Gabinete de la Nación, Guillermo Francos ante la Cámara de Diputados, marcada por la entrega tardía de un extenso informe de 1.200 páginas apenas tres horas antes de la sesión. Según explicó, esa dinámica hizo imposible revisar con precisión las respuestas frente a las consultas previas que habían realizado los legisladores.
La expectativa estaba puesta en que el funcionario respondiera sobre la coyuntura y las denuncias públicas en torno a la Agencia Nacional de Discapacidad (Andis). Sin embargo, Toniolli señaló que las contestaciones fueron vagas, con un estilo que definió como “hablar mucho sin decir nada”. Durante siete horas, el jefe de Gabinete evitó dar definiciones sobre los temas más sensibles, entre ellos el escándalo de los audios de Fernando Spagnuolo.
«Lo que todos esperábamos es algunas respuestas con respecto a la coyuntura y a la noticia de público conocimiento. La verdad que no hubo, ni en las primeras, donde hay un estilo vago de respuesta en el informe, frente a cosas muy precisas, ni en las segundas, ni en los temas más de coyuntura, el tema del Andis, los audios de Spagnuolo, sin demasiadas precisiones por parte del Jefe de Gabinete, que es una especie de Fidel Pintos, ¿no? o para los más jóvenes, Lizy Tagliani, cuando hace esas intervenciones donde ejercita cómo hacer uso de la palabra sin decir absolutamente nada durante varios minutos, en este caso fueron, no sé, siete horas, aproximadamente, sin decir absolutamente nada».
En ese sentido el referente del Movimiento Evita, destacó además que desde el Oficialismo Nacional deberían ponerse de acuerdo, «los audios son reales, no son reales, bueno, afirmaron que sí, entonces, la verdad es siempre la verdad, ¿no? Si los audios son reales, no importa si salen antes de las elecciones, si salen después de las elecciones, cuándo salen, si hay un cálculo ahí, si hay una interna del Gobierno, como parece haber, porque algunos diputados, como la diputada Pagano, empezó a tratar de deslindar responsabilidades porque se la acusaba ella de difundir esos audios, empezó a dar datos precisos de gente que está en Jefatura de Gabinete y que podría haber tenido relación con estas situaciones».
El legislador remarcó la gravedad del caso porque involucra a un área muy sensible del Estado: la política de discapacidad. Recordó que el Gobierno ya había intentado desacreditar el Certificado Único de Discapacidad (CUD) con maniobras comunicacionales, como cuando el vocero presidencial Adorni exhibió la radiografía de un perro para cuestionar el sistema.
Para Toniolli, se trata de un patrón: primero instalar la idea de corrupción o “curro” en un derecho adquirido, para después desmontar una política pública. “El CUD garantiza derechos a personas que muchas veces no pueden acceder a un trabajo y necesitan un ingreso para vivir. Esa es la gravedad de este tema y por qué genera tanto impacto social”, advirtió.
A diferencia de otros casos de presunta corrupción, como el de la “estafa Libra”, que tuvieron más repercusión en política y medios que en la ciudadanía, el caso Spagnuolo llegó de lleno a la sociedad. Según el dipuado esto se debe a la alta sensibilidad que despierta el tema discapacidad y al hecho de que las víctimas directas son personas vulnerables a las que desde diciembre de 2023 se les viene negando el acceso al certificado.