El Presidente expuso en la Cumbre Iberoamericana que se desarrolla en República Dominicana. Profundizó su reclamo a la Unión Europea, dijo que las tasas y sobrecargas del FMI son abusivas y agradeció por incluir la cuestión Malvinas en el evento.
“Hacia una Iberoamérica justa y sostenible. Ese es el objetivo que hoy nos convoca”. Con esa frase el presidente Alberto Fernández dio inicio a su extenso discurso en el marco de la primera sesión de la XXVIII Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno, la cual se desarrolla en la ciudad de Santo Domingo, República Dominicana.
El foco de su exposición estuvo puesta en la crisis financiera que genera el cambio climático en el Mercosur y las trabas en las exportaciones que impone el viejo continente. El Presidente argentino insistió en su pedido para flexibilizar aquellas medidas y se deje sin efecto el denominado “pacto verde”, que rige desde julio de 2019 y que claramente perjudica a la región para ingresar materias primas a Europa.
“Siendo América Latina el continente más desigual del mundo, semejante propósito asoma ante nosotros como un desafío muy difícil. Si advertimos además que lo justo y sostenible que buscamos debe ser alcanzado en un tiempo en el que la humanidad aún se repone de los efectos de una pandemia, en el que el mundo central se enreda en una guerra inexplicable que altera la economía global, en el que crujen los cimientos del sistema financiero internacional y en el que el clima observa cambios que anegan o secan territorios vitales para la humanidad, entonces la dimensión del objetivo se vuelve gigantesca”, sostuvo el mandatario argentino ante sus pares.
Y agregó: “No vengo a sembrar desánimo entre nosotros. En todo caso destaco el escenario que enfrentamos reclamando el coraje y la convicción transformadora que hace falta para que lo justo y sostenible en Iberoamérica sea una realidad y no sea solo parte de la retórica discursiva de este encuentro”.
En otro tramo del discurso, Fernández dejó en claro que “la globalización está en crisis” y apuntó contra el capitalismo financiero por “hacer temblar la economía cuando otra de sus burbujas cargadas de especulación explota inesperadamente”.
“El mundo central que pasivamente deja inflar esas burbujas, corre en socorro del “sistema” ante la explosión para que el efecto dominó que ya vivimos hace quince años no vuelva a asomar. A esta altura de los acontecimientos, con tanta concentración, con tanto juego especulativo, ya deberíamos entender que al sistema financiero actual no hay que socorrerlo más. Debemos cambiarlo drásticamente”; añadió.
Alberto Fernández también le dedicó un párrafo a la gestión del expresidente de Estados Unidos, Donald Trump. “Nuestra América, en los años en los que Donald Trump gobernó en los Estados Unidos, sufrió un proceso de desintegración regional tremendo. La UNASUR fue desvaneciéndose a medida que sus miembros se desvinculaban cumpliendo mandatos impuestos por aquel gobierno republicano. Hasta la OEA quedó al servicio de ese objetivo desintegrador convalidando un golpe de Estado en Bolivia”.
A continuación, el Presidente aseguró que “si queremos una Iberoamérica justa y sostenible, el primer paso que debemos dar es restablecer la unidad. Una unidad que no permita que se prolonguen bloqueos económicos que afectan a pueblos de la región”.
“En un tiempo tan difícil como el que atravesamos, signado por un descontento social en el que encuentran eco los discursos del odio que castigan las democracias, estamos moralmente obligados a unir esfuerzos. Somos todos pasajeros de un mismo barco. Tenemos pues un destino común que nos convoca. “Nadie se salva solo”, nos diría Francisco”; continuó Fernández citando al Papa Francisco.
Por otro lado, el jefe de Estado consideró que “la búsqueda de esos objetivos nos obliga a transitar un camino colmado de obstáculos” y en sus argumentos mencionó los elevados e insostenibles niveles de endeudamiento que condicionan el crecimiento de nuestros países. “Las tasas y sobrecargos que el Fondo Monetario Internacional impone a países endeudados resultan abusivos. Esa realidad colisiona con esa arquitectura financiera internacional que antes cuestioné”.
“Es necesario acrecentar la transparencia de las instituciones financieras internacionales y abogar por un mayor acceso a facilidades crediticias, a fin de impulsar el crecimiento y el desarrollo antes de que la especulación”, sentenció.
Al finalizar su exposición, Fernández agradeció a los Jefes de Estado y de Gobierno de los países iberoamericanos y a los Representantes de los Estados Miembros, por el Comunicado Especial sobre la cuestión de las Islas Malvinas. “Agradecemos profundamente el permanente respaldo al llamado a la reanudación de las negociaciones bilaterales con el Reino Unido conforme las resoluciones de Naciones Unidas y otros foros internacionales”, afirmó el Presidente argentino.