En 2022 la alcoholemia positiva se multiplicó un 40 por ciento en conductores profesionales. Para el subsecretario de la Agencia Provincial Seguridad Vial, Osvaldo Aymo, esta situación se da por la falta de controles en gestiones anteriores.
El funcionario expresó que deberían realizarse controles tanto periódicos como sorpresivos. El objeto de estos controles no solo es mejorar la seguridad, sino también obtener mayor información acerca de las costumbres de los conductores profesionales.
Por otro lado, aseguró que la medida de alcohol cero es ineficiente e inaplicable. Primero, no logra disminuir los riesgos de circular en la vía pública. Y en segundo lugar, los alcoholímetros tienen un margen de error, por ende son incapaces de medir con certeza la ausencia de consumo de bebidas alcoholicas.