Escrito por LT3
Tras el anuncio oficial del Presidente de la Nación confirmando su visita a la ciudad para celebrar el 20 de junio, los ecos de festejos pasados sin la venia presidencial parecieron quedar atrás y el Monumento preparó su mejor vestuario para recibir, como corresponde al Presidente, al Gobernador de la Provincia y al Intendente.
Desde muy temprano el color celeste y blanco empezó a llenar las calles de la ciudad con gente que se acercaba de a poco al encuentro del Monumento a la Bandera, lugar en donde Manuel Belgrano izó la enseña patria por primera vez, y lugar en donde en el 104 aniversario del fallecimiento de su creador, volvería a flamear en una mañana de cielo despejado y buena temperatura.
Escenarios preparados para distintos números artísticos que coronarán la celebración cultural con cantos y bailes, junto a la gastronomía y los concursos de asado y pastelitos funcionaron como el marco ideal para una mañana que volvería a tener la presencia de un Presidente de la Nación nuevamente en Rosario desde la visita de Mauricio Macri por última vez, un 20 de junio de 2019.
Javier Milei llegó acompañado de su hemana Karina Milei y gran parte de su gabinete, como la vicepresidenta Victoria Villarruel, el ministro del Interior, Guillermo Francos, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello, el ministro de Defensa Luis Petri entro otros referentes del Gobierno Nacional, algo que terminó de apuntalar la importancia protocolar que tuvo la primera visita de Milei a la ciudad de Rosario desde que fue coronado como Presidente de los Argentinos.
Los discursos comenzaron con la palabra de Pablo Javkin, quien celebró la visita de Javier Milei a la ciudad y reconoció en su figura y en la de Patricia Bullrich, a los responsables de la presencia de las fuerzas federales en Rosario para reforzar la seguridad “algo que Rosario agradece. Este viento a favor que tanto reclamamos, hoy se da con la unión y la coordinación del trabajo entre Nación, Provincia y Municipio”. Javkin destacó que es gracias a Milei que por fin después de tanto reclamo, “llegaron las luces azules que tanto pedíamos para cuidar a Rosario”. Finalmente el intendente de Rosario remarcó la importancia de seguir el legado de Belgrano, “ser dignos de llamarse hijo de la patria” haciendo alusión a las inscripciones que tiene el Monumento a la Bandera.
Tras la palabra de Pablo Javkin, llegó el turno del Gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, quien con un discurso sólido, celebró la presencia del Gobierno y del Pueblo agradeciendo sinceramente la presencia del Presidente y la Vicepresidenta en la ciudad y destacó que desde el inicio de la gestión de Milei, tuvo las respuestas esperadas en los ministros de Defensa, Seguridad, Justicia y del actual Jefe de Gabinete, para permitir todos los mecanismos y fuerzas necesarias para llevar la paz a Rosario. “Tres poderes del Estado juntos poniendo orden para traer la paz y la tranquilidad que todos estábamos ansiando”.
Tras los agradecimientos, Pullaro se metió mas adentro de la arena política y reclamó la importancia del federalismo y que el equilibrio fiscal, “que acompañamos y celebramos desde la provincia de Santa Fe, deba ser acompañado del desarrollo económico, las obras necesarias y los chicos en la Universidad”. De esta manera, el Gobernador realizó en forma directa los reclamos que Santa Fe le hace a la Nación, desde un tono imperativo, pero lejos de chicanas o posicionamientos partidarios. “Vuelva cuando quiera que acá será siempre bienvenido” cerró inclusive Pullaro luego de pasar la lista de pedidos, para finalizar citando el prólogo de la Constitución Nacional, celebrando la importancia de la provincia en su conjunto, como terreno en donde se enarboló por primera vez la Bandera Nacional, pero también, la tierra de la Constitución y el terreno de la única batalla realizada por el General San Martín en suelo argentino.
Finalmente el presidente de la Nación Javier Milei se paró frente al público con el Monumento a la Bandera como testigo y el río Paraná cerrando la postal de miles de personas que se acercaron con banderas y pañuelos celestes y blancos. En uno de los mejores discursos desde que Milei se convirtió en Presidente de la Nación, el libertario comenzó destacando la figura de Manuel Belgrano como “héroe de la revolución y padre de la Argentina” y comenzó a desandar el camino del creador de la Bandera, como alguien que luchó “contra la casta y el centralismo porteño”, recordando episodios como el del triunvirato que le prohibió enarbolar la bandera en ese momento, cosa que “a Belgrano le importó un rábano”.
De esta manera, Milei realizó un paralelismo entre su gestión de Gobierno y sus premisas de libertad y de finalizar los privilegios de los políticos y de la casta, en comparativa con un Manuel Belgrano, austero y luchando por el federalismo ante un centralismo porteño que “buscaba sostener sus privilegios o dependencias del gobierno español”. “A Belgrano las directivas de Buenos Aires les importaron un rábano e hizo lo que creyó correcto, porque la libertad no espera a las órdenes de un burócrata” expresó el presidente.
Finalmente, el discurso de Javier Milei tuvo el único anuncio de la jornada, cuando el libertario expresó exultante que “teniendo cerrada la Ley Bases y el Paquete Fiscal” convocó a los políticos, gobernadores, ex presidentes, empresarios, funcionarios, “y a todos los argentinos a celebrar el próximo 9 de julio en Tucumán la firma del pacto de mayo”, para cerrar su discurso con el ya tradicional “viva la libertad carajo” que luego dio espacio al “viva la patria” y sus correspondientes vitoreos.
Entre saludos de camaradería, selfies y respetos, la comitiva presidencial se fue retirando de la ciudad en el helicóptero que partió cerca de las 11:30 de la mañana nuevamente hacia la ciudad de Buenos Aires, para que el presidente retome su agenda internacional. La ciudad, sigue celebrando a Belgrano y la creación de la bandera, con asado, pastelitos y eventos culturales que se realizarán durante todo el fin de semana en Rosario. Un nuevo aniversario de la muerte del prócer Manuel y un poco de Justicia para el 20 de junio y un Monumento Nacional a la Bandera que durante demasiado tiempo, recibió la mirada indiferente por parte de la investidura presidencial, que incluso hasta dejó a medio camino las obras de refacción y conservación del mismo.