Escrito por LT3
Dos nuevas películas se suman a la cartelera del circuito de exhibición comercial en las salas de la ciudad: “Mi villano favorito 4”, nueva entrega de la exitosa saga animada que marca el regreso de los divertidos personajes de los Minions y Gru; y “La Conversión”, un drama histórico italiano, con la historia real de un niño judío secuestrado y convertido al catolicismo; son las novedades de la semana
“Mi villano favorito 4”
Film de Illumination Studios, cuarta entrega de la saga animada que comenzó en 2010 y que marca el regreso de los divertidos personajes de los Minions y Gru, después de siete años, y tras el éxito taquillero del spin off “Minions: Nace un villano” en 2022. Dirigida por Chris Remaund y escrita por Mike White y Ken Daurio, este es un nuevo capítulo se centra en la vida de Gru y Lucy, quien, junto a sus hijas, ahora le dan la bienvenida a un miembro de la familia, Gru Jr, que se empeña en atormentar a su padre. Ellos, junto a los Minions, ahora convertidos en superhéroes, deberán enfrentarse a un desafío que pondrá en peligro sus vidas. En su versión en castellano, el doblaje cuenta con la participación la cantante argentina María Becerra para el personaje de Poppy.
“Gru, el supervillano convertido en agente de la Liga Antivillanos favorito del mundo, regresa para una nueva y emocionante y audaz era de caos de Minions, junto a su esposa y compañera agente de la Liga Antivillanos Lucy, sus tres hijas adoptivas (Margo, Edith y Agnes) y el miembro más nuevo de la familia Gru, Gru Jr., que pretende atormentar a su padre. La familia se ve obligada a huir cuando se convierten en objetivos del criminal fugitivo Maxime Le Mal y su novia, la mujer fatal, Valentina”, señala la sinopsis oficial. De esta manera, la trama está marcada por la llegada de un bebé, con la paz del hogar que es interrumpida rápidamente por el nuevo villano; mientras que las criaturas amarillas asumen nuevos roles heroicos.
Steve Carell y Kristen Wiig retoman sus roles como Gru y Lucy, respectivamente, otorgando sus voces para la interpretación. Además, los actores Will Ferrell y Sophia Vergara incorporan sus voces para los antagonistas Maxime y Valentina. La película, producida por Illumination, también contará con las voces de Joey King, Miranda Cosgrove, Dana Gaier, y Madison Polan para dar vida a los demás personajes. también introduce a varios nuevos personajes con las voces de destacadas celebridades. Entre ellas destacan Stephen Colbert, Chloe Fineman y el veterano de la saga, Pierre Coffin, quien regresa como la icónica voz de los Minions.
En relación con los villanos de “Mi villano favorito 4”, Steve Coogan vuelve a prestar su voz a Silas Ramsbottom, el jefe de la Liga Anti-Villanos. El equipo creativo detrás de la película incluye al nominado al Oscar Chris Renaud como director y a Chris Meledandri como productor, respaldado por Brett Hoffman. El guion es obra de Mike White, creador de White Lotus, junto con Ken Daurio, guionista de todas las entregas anteriores de “Mi villano favorito”. Este regreso de Gru y sus hijas, Margo, Edith y Agnes, a la pantalla grande representa también un reencuentro con su público fiel, que ha seguido la evolución de esta franquicia a lo largo de los años.
“La Conversión”
Drama histórico italiano, dirigido por Marco Bellocchio y protagonizado por Paolo Pierobon, Fausto Russo Alesi, Barbara Ronchi, Enea Sala, Leonardo Maltese, Filippo Timi, Fabrizio Gifuni, Bruno Cariello. El film, reconstruye la historia real de Edgardo Mortara, un niño judío secuestrado y convertido al catolicismo en 1858. Mortara era un joven judío que vivía en Bolonia, Italia. En 1858, después de ser bautizado en secreto, él fue separado de su familia por la fuerza para criarlo como cristiano bajo la custodia del Papa Pío IX. La lucha de sus padres por liberar a su hijo se convirtió en parte de una batalla más amplia que enfrentó al papado contra las fuerzas de la política. Con los años Mortara se ordenó sacerdote agustiniano.
El director italiano Marco Bellocchio, que a finales de 2024 cumplirá 84 años, el realizador de grandes clásicos de la renovación del cine italiano como “I pugni in tasca” (1965) y “En nombre del padre” (1971), y también de ese film escándalo llamado “El diablo en el cuerpo” (1986), viene disfrutando desde hace un par de décadas de una prolífica y fructífera etapa creativa. A títulos producidos hacia comienzos del milenio como “La hora de la religión” (2002) y “Vincere” (2009) se le sumaron recientemente notables películas como “Sangre de mi sangre”, “Bella mía” y el documental en primera persona “Marx puede esperar”, además de la miniserie para la televisión italiana “Esterno notte”.
Este largometraje, que compitió el año pasado en la sección oficial del Festival de Cannes y ahora llega a las salas de cine de Argentina, está narrado en tres grandes bloques temporales: un primer período que se corresponde con el “rapto”, la llegada a la escuela religiosa donde pasará los siguientes años y los intentos de los padres por recuperarlo; una segunda en la cual el juicio al sacerdote de la Santa Inquisición encargado de ejecutar la orden de traslado ocupa el centro del relato; y una tercera, la más breve, con un Edgardo adulto asistiendo a los últimos años del papado de Pio IX y, finalmente, su regreso transitorio al hogar materno. Esta historia, ya había intentado llevarla al cine Steven Spielberg, pero finalmente no se concretó.
Como en su ópera prima “I pugni in tasca”, aquella que sorprendió al Festival de Venecia en 1966, el director, ahora a sus 84 años, vuelve a explorar los cimientos de las instituciones más importantes de su país, desde la familia hasta la Iglesia, enclaves de poder sostenidos en la figura de un padre y patriarca, encarnado en este caso por el beatificado Pío IX. Un tiempo de disputas políticas y ambiciones eclesiásticas que desgarran para siempre la infancia y el espíritu del niño Mortara. También, es evidente que, a esta altura de su experimentada carrera, el director se encuentra en una etapa de reconciliación con un estilo de narración clásica que no formaba parte de sus primeras marcas artísticas y que con creatividad lo confirma en “La conversión”.