Asistió a partir de una invitación que le realizó la comisión tras conocerse la disolución de la Guardia Urbana Municipal (GUM) y la creación de la Dirección de Control de Proximidad, la secretaria de Control y Convivencia municipal, Carolina Labayru, quien al iniciar su exposición explicó que “en el mismo acto se disuelve la GUM y se crea la Dirección de Control de Proximidad” y recordó que “desde el inicio de la gestión -del intendente Pablo Javkin- se habían planteado el objetivo de realizar cambio, porque los requerimientos no son los mismos que 20 años atrás”.
Asimismo marcó que la disuelta GUM era el área que “más críticas había tenido de parte de la ciudadanía” y consideró que “la gente no sabía bien para qué estaban”. También acotó que a partir de las normativas propias “tenían 8 horas de trabajo, no 6 como el resto de los municipales” para agregar que “no se cumplían”.
Precisó que la decisión que se adoptó es “para cambiar el paradigmas del control” para agregar que “esta refuncionalización no se puede hacer de un día para otro”.
Remarcó que uno de los objetivos “es darle especificidad a las funciones” de los agentes de la nueva área, para “consolidar la presencia del Estado en los barrios”.
Puso como ejemplo lo que están realizando los agentes de la nueva repartición en el Centro Comercial Tiro Suizo, en la avenida San Martín. “Ya hay vínculos entre los comerciantes y los vecinos”, con los agentes municipal que, precisó ante una consulta, serán siempre los mismos los que estarán en cada zona de la ciudad.
Consignó sobre tareas ya realizadas en dicho paseo comercialm que “los vecinos les plantearon que no se podía ascender y descender de los colectivos porque en las paradas había autos mal estacionados. Con un simple silbato se persuade” para que no estacionen. Agregó otro ejemplo, en un lugar había cartelería que impedía estacionar porque había estado reservado para un banco que ya no tenía su local en el lugar, “se retiraron los carteles”. También dijo que los comerciantes y vecinos tienen “el telefóno” de quien está a cargo de los agentes en cada área.
Ante una consulta de la concejala Gigliani respecto si “los mismos agentes pueden hacer inspecciones”, sostuvo Labayru que “pueden hacerlas pero está la Dirección de Inspecciónl” para ello.
Insistió en varias ocasiones la secretaria de Control y Convivencia que la intención es “consolidar la presencia del Estado. Estos agentes dan la cara todos los días, son los mismos en cada centro comercial” y acotó que “no es lo mismo concurrir por un reclamo que estar caminando” de manera constante.
“El concepto es más calle, menos oficinas”, sostuvo Labayru, quien respecto a los horarios de trabajo precisó que son de acuerdo a los comerciales, de 8 a 14 y de 14 a 19.
También precisó que “se está cambiando una modalidad de trabajo que hubo durante 17 años”, de existencia de la GUM, “estamos yendo de a poco, somos muy cautos”, aseveró.
Dijo también la funcionaria que los reclamos para los que anteriormente concurría la ex Guardia Urbana Municipal, “la inmediatez, ahora los está tomando Control Urbano, pero no podemos colapsarla”.
Preguntó a su turno el edil Salinas sobre la cantidad de agentes que integran la nueva área, y al respecto precisó Labayru que “son 168, casi como la GUM, que eran 180”.
Recordó acerca de las denuncias que “todas se reciben en el 147, y luego se derivan” al área que corresponda.
El concejal Megna, requirió que especificara sobre “la tarea concreta” de Control de Proximidad, y ante ello insistió que se pretende “consolidar la presencia del Estado en la vía pública” y dijo que los agentes “pueden realizar actas, realizar secuestros, realizar clausuras, pero el objetivo es educación, disuasión y persuasión”.
Ante una consulta de la edila Carbajal marcó que las áreas de la Secretaría de Control y Convivencia, trabajan todos los días las 24 horas, y planteó ante pregunta sobre operativos conjuntos con fuerzas de seguridad o con otras áreas que, según corresponda, se realizan, ya sea con Tránsito, o de varias dependencias, como puede ser ante espectáculos en el Anfiteatro Municipal “Humberto De Nito”, o en el verano en la zona de La Florida.
Por su parte el concejal López Molina dijo que “quedan claros los objetivos, que ojalá se cumplan,” y recordó cuando el intendente Javkin al abrir las sesiones en marzo del 2020, prepandemia, había anunciado la unificación de todas las áreas de control, y “tengo para mí que más que la pandemia fue la presión del sindicato de no permitir esa unificación” para mencionar que “se perdió una oportunidad que debería haber sostenido”.
Preguntó “si sigue estando en los planes” tal unificación y consideró que se debería haber presentado de otra manera a la nueva área, “con los detalles, como nos los estás diciendo, incluso para que los propios agentes sientan que son parte de algo distinto”.
Respecto a los uniformes recordó la secretaria Labayru que “la licitación para los uniformes fue para Fiscalización, Control Urbano, Inspección y la ex GUM, cuatro áreas, a las que no se les habían entregado” y lo mismo los zapatos “que hacía dos años no se les habían entregado”.
La concejala Gigliani precisó que “asumo que no hay nadie que haya dicho la GUM debería haberse sostenido. Era una decisión saludable para los propios agentes”.
Para el edil Salinas “se intentó despolicializar la demanda ciudadana” que se requería respecto a la GUM. Ante ello la secretaria Labayru sostuvo que “el espíritu cuando se creo era otro, cambiaron en 17 años las demandas al municipio”.
El concejal López Molina consultó respecto si como tenía la GUM habrá un reglamento para quienes se desempeñan en la nueva área, y contesto la secretaria de Control y Convivencia, que “no, porque el reglamento lo hacía muy policial”.
En el final de la reunión el concejal Megna preguntó a dónde debían recurrir los ciudadanos en caso de denuncias respecto a la tarea de los agentes de la flamante área y consignó Labayru que se las debe efectuar a la línea 147.