“Me dio paz y calma que se sepa quienes lo asesinaron”, reveló Graciela, la madre del joven asesinado el 18 de enero de 2020 en Villa Gesell. “Estamos felices por el trabajo que hicieron los abogados”, agregó.
Por NA/LT3
Graciela Sosa, madre de Fernando Báez Sosa, aseguró este lunes que están “conformes” con las condenas que el tribunal de Dolores dispuso contra los ocho rugbiers y aseguró que le dio “paz y calma que se sepa quienes lo asesinaron”.
“Hoy vi sonreír a Fer y ahora puede descansar en paz. Estamos conformes y es lo que esperamos desde hace tres años. Me dio paz y calma que se sepa quienes lo asesinaron”, reveló Graciela en conferencia de prensa tras las condenas de cinco de los acusados a prisión perpetua y de los tres restantes a 15 años por ser partícipes secundarios del crimen del joven, ocurrido el 18 de enero de 2020 a la salida del boliche Le Brique de Villa Gesell.
Por su parte, el padre de Fernando, Silvino Báez, destacó y agradeció la tarea que realizaron los abogados que conformaron el equipo de particular damnificado, encabezados por Fernando Burlando, Fabián Améndola y su hijo Facundo Améndola.
“Seguramente los abogados van apelar, pero es tarea de ellos. Estamos felices por el trabajo que hicieron”, resaltó Báez.
Los padres del joven asesinado afirmaron que están “conformes” con el veredicto, más allá de las presentaciones que hagan los letrados para que los ochos sean condenados a prisión perpetua.
“Vamos a aprender a vivir con el dolor. Ahora podemos sonreír un poco”, señalaron.
En referencia a los estados de ánimo de los imputados durante la sentencia, Graciela sentenció: “Ellos disfrutaron de matar a mi hijo. No puedo perdonarlos porque la ausencia de Fer es perpetua”.
Asimismo, la madre del joven reveló que “siempre” escucha “los audios de Fer” y ve “sus videos”. “Lo necesito porque tengo que estar fuerte por el, no puedo rendirme”, expresó con dolor Graciela Sosa.
Los padres de Fernando, quienes estuvieron acompañados por Burlando, Fabián y Facundo Améndola, añadieron: “A pesar del dolor, después de la sentencia pude ver a mi hijo sonreír. Ahora puede descansar en paz”.
Sosa indicó: “Ya no hay abrazos, un te quiero, una torta para su cumple, pero ahora hay que seguir para adelante”.
En tanto, Burlando tomó la palabra en el cierre y agradeció el acompañamiento de los medios y la labor antes, durante y después del juicio.