Fue un vecino quién sostuvo que vio cuando uno de los efectivos se acercó al auto después de que chocó contra el camión y quiso “rematarlos”.
Una vez más testigos complicaron a los Policías acusados por la Masacre de Monte. Un vecino afirmó que uno de ellos quiso rematar a las víctimas.
“Después del fuerte estruendo del choque, veo bajarse al conductor de un móvil policial en posición de tiro con un arma de fuego en la mano. Pierdo de vista al conductor y escuchó una detonación de un arma de fuego”, explicó Ignacio Cattaneo, vecino de la localidad.
Se trata del segundo testigo que comprometió a los cuatro acusados. El primero fue el hermano de Aníbal Suárez, una de las víctimas, quién señaló que los efectivos los habían “coimeado”.
Por el asesinato de Aníbal Suárez de 22 años, Danilo Sansone (13), Camila López (13), Gonzalo Domínguez (14) y las lesiones a Rocío Quagliarello están siendo juzgados el excapitán de la policía bonaerense Rubén Alberto García y los oficiales Leandro Ecilape, Mariano Ibáñez y Manuel Monreal.
Junto a Cattaneo se sumó a dar testimonio frente al Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 4 Héctor Mensi, chofer del camión cuyo acoplado fue impactado por el Fiat 147 en el que viajaban los cuatro jóvenes fallecidos.
Allí relató que cerca de las 23.00 dejó el camión sobre la banquina y se tiró a dormir. Minutos después aseguró que escuchó cuatro disparos y tras el accidente dos más.
“Precisamente fueron tres estruendos y el silbido de una bala. Se levantó mucha tierra alrededor al camión después del choque. Estaba dormido. Cuando corro la cortina veo un cuerpo al lado, entre toda la tierra”, indicó.
Cuando sintió un golpe Mensi se bajó del rodado y vio dos patrulleros junto al auto: “No pude reconocer el modelo del vehículo porque ya estaba destrozado”.
“En esa situación escuché a alguien gritar ‘quédate quieto, quédate quieto’ y dos disparos más. Me bajé del camión y me fui hacia la trompa para refugiarme. Pude ver que había un cuerpo atrás de la tracción del camión. Escuchaba los gritos de una chica pidiendo auxilio”, sostuvo el chofer.
Por último, el testigo manifestó que estuvo varias horas en la Comisaría y que los Policías le habían informado que lo que ecsuchó “eran contraexplosiones de motos y que no habían sido disparos”.