Así lo confirmó en diálogo con LT 3 el padre Ariel Barbero, cura párroco de esa zona de la ciudad
Por Marcelo Maricich
El sacerdote sostuvo que la sociedad está resignada a la violencia, se ha naturalizado, afirmó
Detalló que no sólo en ese barrio se dan balaceras todos los días
“En casi todo Rosario parece que se vive en un estado de guerra. Los ruidos de las balas son algo normal”, dijo el padre Barbero