Archax es la nueva invención de Tsubame Industries, una startup que va a dar mucho que hablar.
Hace bastantes años que existen los vehículos inteligentes, incluyendo aquellos coches que utilizan Android Auto. Los coches eléctricos, por su parte, también cuentan con funciones inteligentes muy interesantes que pueden servir de trampolín para que acabemos olvidándonos de la conducción. Lo que no tiene ninguno de estos vehículos es la posibilidad de convertirse en un robot tripulado como si estuviéramos en la mismísima Evangelion.
En cambio, Archax es un vehículo de transporte bastante peculiar. Se trata de un robot que puede convertirse en vehículo como ocurre en la famosa serie de animación y películas de Transformers. Detrás de esta invención se encuentra Tsubame Industries, uno de los mejores ejemplos de que la robótica y las ciencias de la automoción japonesas siempre están a la vanguardia en todo el mundo.
Shinji, sube al EVA que te vamos a contar cuáles son las particularidades de Archax.
Archax, el juguete que todos hemos querido tener, ahora una realidad
Con 4,5 metros de alto y 3,5 toneladas de peso, estamos ante una auténtica monstruosidad construida en acero, aluminio y plástico impreso en 3D para hacer las formas de las partes más complejas. De esta manera, debido a su peso ciclópeo no es especialmente rápido, ya que solamente alcanza los 10 kilómetros por hora. Sin embargo, esto es un auténtico hito, ya que, con semejante peso, es muy difícil que este robot alcance mucha más velocidad.
En cualquier caso, su peculiaridad más notable es que se transforma y pasa de ser una especie de vehículo humanoide a convertirse en un vehículo perfectamente conducible. Este nivel de conversión le da un valor increíble, ya que es una demo técnica viviente del potencial que tienen este tipo de tecnologías.
Para lograr esto, lo cierto es que ha sido necesario incorporarle 26 articulaciones que funcionan como un engranaje perfecto para facilitar su conversión. Además, estéticamente es muy bonito y recoge todas las influencias propias del género al que trata de prestar atención para inspirarse.
¿Que podríamos esperar de un país que tiene un Gundam construido a tamaño real? Pues, como es evidente, que quisieran convertirlo en una realidad. En cualquier caso, no se queda más que en una demo técnica, pero quién sabe si en el futuro habrá más de uno o dos de estos gigantescos ingenios sirviendo en fábricas o en lugares dónde el ser humano no puede permanecer sin protección durante jornadas prolongadas.
En los vídeos de demostración subidos a Twitter por parte de Tsubame Industries, la startup que se ha arriesgado a crear este vehículo humanoide, se puede ver a la perfección su movimiento.
En resumidas cuentas, estos son sus puntos más fuertes:
- Sus dimensiones son una absoluta locura: mide 4,5 metros y pesa 3,5 toneladas.
- Su velocidad punta es de 10 kilómetros por hora.
- Tiene 26 articulaciones, que le ayudan a convertirse en un vehículo más allá de servir únicamente como robot.
- Es definitivamente un mecha: se trata de una especie de robot humanoide. El piloto desde el interior está totalmente aislado y ve el mundo a través de una pantalla.
- Las zonas de plástico de este robot han sido creadas utilizando impresión en 3D.
- El resto de partes son de acero y aluminio, lo que le da ese acabado tan robusto.