Antonio Salinas, titular de la Oficina de Defensa del Consumidor, dialogó con La Barra de Casal sobre cuál es el pedido que realizará en su participación de la audiencia pública para el aumento tarifario de Aguas Santafesinas. Expresó: “En principio vamos a dejar planteado que nos parece que el aumento planteado por Aguas Santafesinas es excesivo. Se propone un aumento en dos tramos, primero del 40% y después del 20%, sobre ese 40 ya aplicado, por lo ende el aumento que vamos a ver impactado de acá a dos o tres meses los santafesinos y santafesinas ronda el 68%”. “Eso nos parece que está muy por encima de otros aumentos planteados, inclusive muy por encima de la inflación proyectada por los estados municipal, provincial y nacional”, sostuvo. Agregó: “Entonces por un lado nos parece excesivo y por el otro nos parece que hay otras formas alternativas de captar ese dinero que hoy le está faltando a la empresa”. Aclaró: “Entendemos lo que la empresa aduce tiene que ver con la valoración de los insumos y con la dificultad que existe hoy con la captación de agua por la bajante del Río Paraná. Pero entendemos que hay otras alternativas que todavía no se han explorado y que sería importante hacerlo”.
Contó: “Hay una cosa que nos preocupa mucho y nos parece que es gravísimo que todavía se mantenga. Los hogares de Rosario más del 70% no mide el agua que consume, es decir, la tarifa de agua en más del 70% de hogares se calcula por los metros cuadrados de la vivienda y no por la cantidad de litros de agua que consume mensualmente o bimestralmente una familia”. Explicó: “Eso nos parece en principio, muy poco eficiente a la hora de recaudar fondos a partir de las tarifas porque tenes situaciones de casas muy grandes con poco consumo y casas muy chicas con mucho consumo”. Destacó: “Me parece que avanzar en micromediciones, necesitamos ir al 100% de las casa de rosario midiendo el consumo de agua por una eficiencia tarifaria y además por una cuestión de cuidado del recurso que empieza a ser escaso y que tiene que ver con el agua potable”.
Comentó: “Por otro lado nos parece que avanzar en incorporar en la red a las más de 40 mil familias que viven en barrios populares y hoy no pueden acceder al servicio”. Aclaró: “Esto generaría nuevos usuarios por ende más tarifas, más tributo, y mejoraría la situación de estas familias que hoy no acceden a un derecho tan esencial como es el agua potable”.