La iniciativa que busca favorecer la accesibilidad de los peatones tuvo visto bueno en comisión de Obra Pública. “De Oroño a Maipú no hay una vereda en buen estado”, destacaron, y se coincidió en el mantenimiento de fachadas históricas para establecer esa arteria como “polo turístico comercial”. Se prevé un horario de carga y descarga hasta el mediodía, y permitir el estacionamiento desde las 13 en adelante
El proyecto se enfoca en mejorar las veredas y fachadas para establecer el lugar como polo turístico comercial.
Obtuvo acuerdo en la comisión de Obras Públicas del Concejo el proyecto de reforma urbanística para priorizar la movilidad peatonal sobre el centro comercial calle San Luis en las seis cuadras que contempla la parte neurálgica. Esto, a pesar de que en su momento los comerciantes aseguraban de que la mayoría de compradores eran mayoristas de otras localidades y comercios de otros barrios.
Se trata de la propuesta de Anahí Schibelbein, del bloque radical, que plantea “posicionar al peatón como eje central de las políticas de transformación urbana en el sector, para que gane accesibilidad y autonomía en el centro de la ciudad”, con mejoras en las veredas para contribuir a una adecuada movilidad de peatones, usuarios de taxis, colectivos y bicicletas que busquen realizar compras allí. Aunque se descartó la parte del proyecto que establecía ensanchar las veredas y quita del estacionamiento medido.
La concejala dio detalles de las modificaciones, entre las que destacó “que se solicita al Ejecutivo la incorporación de estas seis cuadras al Plan de Veredas y de obras de mobiliario urbano como bancos de descanso y cestos con criterio arquitectónico”.
En torno a sumar este centro comercial al plan de obras, destacó que “es necesario porque desde bulevar Oroño hasta Maipú no hay una vereda en buen estado. Es importante la accesibilidad para los peatones”.
En la reunión, la edila radical explicó nuevas modificaciones al proyecto original, y se analizó la iniciativa legislativa, a la que ediles de la comisión solicitaron que se sume la propuesta de establecer esa arteria como “un polo turístico comercial” con mantenimiento de las fachadas históricas, lanzado el año pasado de la exconcejal Susana Rueda.
Sobre el asunto de ensanchar las veredas, la concejala destacó que fue descartado debido a que “se comprendió el reclamo de sus comerciantes, que planteaban que una obra de magnitud ahuyentaría a clientes y bajaría sus ventas. Y en este contexto de crisis y recesión, contemplamos el reclamo que nos hicieron”.
La iniciativa fue impulsada al calor de febrero, antes del inicio de sesiones, con el objetivo de incentivar las ventas minoristas a peatones en las cuadras entre Mariano Moreno y Corrientes, de dicha populosa arteria.
La propuesta original establecía quita del Estacionamiento Medido y por ende prohibición de estacionar (para privilegiar la carga y descarga y la fluidez del transporte público), y ensanchamiento de veredas, paradas inteligentes y carril exclusivo. Todo esto fue modificado en el proyecto, que continúa ahora su curso tras el acuerdo en la comisión de Gobierno, para luego pasar a la de Presupuesto.
Una salida salomónica a las dársenas de descarga y el estacionamiento
El proyecto de Schibelbein buscaba prohibir el estacionamiento para priorizar la circulación de vehículos, pero esto solo regirá en el horario de carga y descarga, que será hasta el mediodía. Por ende, después de las 13 regiría el Estacionamiento Medido.
Para esto, incluye la incorporación de dos dársenas en cada cuadra: una para carga y descarga de transportistas, y la otra para compradores mayoristas y comisionistas. “Las dársenas se utilizarían entre la hora cero y las 13, ya que el concejal Hernán Calatayud explicaba que El Palacio de la Oportunidad necesita realizarlo en la madrugada por el gran volumen que maneja”.
El proyecto establece una señalética vial urbana “para dar cumplimiento a los cambios que contempla la nueva ordenanza e indicación de: servicios, locales gastronómicos, cajeros automáticos”, detallaron voceros del Concejo.
Se sumaron sugerencias de más concejales, entre ellos incorporar “una franja amplia para los horarios de carga y descarga, según la dinámica de los comercios”.