Se trata de Muhammad Nur Al-Din, un libanés de 24 años – la edad promedio de un miembro de bajo rango de la Yihad Islámica, el brazo armado del Hezbollah- que fue reclutado en la Triple Frontera, mas precisamente en Foz de Iguazú, Brasil, lugar donde vivió un tiempo.
Por Gerardo Scarcello
El 17 de marzo de 1992, cuando se produjo el atentado y según el servicio de inteligencia de Israel, a las 14:42 el joven suicida libanés retiró la camioneta del estacionamiento ubicado en la calle Cerrito (entre Juncal y Arenales), y la condujo hasta la puerta de la embajada, un recorrido que no demoro más de 5 minutos hasta llegar a calle Arroyo 916.
¿Pero cómo llega Muhammad a Buenos Aires?
Según el expediente, Muhammad habría sido reclutado en Foz de Iguazú, por una persona identificada como Farouk El-Omeiri, que tenía lazos estrechos con Hezbollah, y llevado a Buenos Aires por un miembro de la Yihad Islámica.
Entre el 14 y el 17 de marzo, José Salman El Reda, hermano de Samuel El Reda, que tiene pedido de captura vigente por el atentado a la AMIA, se habría ocupado de la estadía y seguridad del suicida y lo llevó a reconocer el estacionamiento donde estaba escondido el coche bomba y el recorrido que debía llevar a cabo.
La Justicia de Rosario
De acuerdo a la causa judicial de la Embajada, José Salman El Reda, había sido detenido y procesado por la justicia federal de Rosario por una importante cantidad de dólares falsificados – conocidos como “super dólares”, que financiarían actividades terroristas.