Por Leo Deangelis
La propuesta celebra la música de la ciudad con la participación de intérpretes de diferentes géneros y generaciones. Hasta el momento, suma tres capítulos dedicados a Fito Páez, Litto Nebbia y el grupo Vilma Palma e Vampiros, en los que 36 artistas interpretaron 18 de sus temas más reconocidos
Se presentó el ciclo “Rosario canta una de…”, que rinde homenaje a la música, artistas y compositores de la ciudad, dándole lugar a las nuevas miradas de las generaciones que siguen haciendo de ella un territorio musical por excelencia, y que hasta el momento suma tres capítulos dedicados a Fito Páez, Litto Nebbia y el grupo Vilma Palma e Vampiros, en los que 36 artistas interpretaron 18 de sus temas más reconocidos.
El proyecto, con idea y producción de Fabián Gallardo, más la coordinación de Ariel Giannuzzi y Francisco Funes (Patagonia Revelde), quienes integran distintos equipos de la Municipalidad, y con realización audiovisual a cargo de Broda, mezcla y mastering de sonido realizado en estudios Penny Lane por Carlos Altolaguirre (ganador de un premio Grammy con Fito Páez), fue llevado al formato vivo ante las y los presentes que se congregaron en Capitán Bar, espacio situado en Mendoza al 900.
El evento contó con la participación de destacadas figuras de la música local como Ike Parodi (ex Vudú Ike y Los Picantes), Mario Laurino (ex baterista de Vudú, Ike y Los Picantes), Franz Funes, Vanesa Baccelliere (Girda y Los del Alba, Canciones en Órbita), Martín López Di Vita (Sidernova), Mica Racciatti, Mario “Pájaro” Gómez (Vilma Palma), Pablo Pino (Cielo Razzo), Roberta Bang (Reset) y un gran número de músicas y músicos. También asistió el subsecretario de Industrias Culturales y Creativas, Federico Valentini.
Ante el público presente, Gallardo tomó la palabra para agradecer y reivindicar la importancia de construir cultura en los tiempos que corren, teniendo en cuenta la actual coyuntura. Así, resaltó el trabajo en equipo para llevar a cabo esta realización y remarcó: “Hicimos algo de música en un momento difícil, en un lugar difícil. Por eso brindo y agradezco. Gracias a ustedes que hicieron este programa”.
En tanto Mica Raciatti, previo a su presentación en vivo, destacó la importancia de generar espacios para poder incluir las diferentes expresiones artísticas. “Todos venimos de diferentes estilos, colores e ideas y eso está buenísimo; el hecho de que hayamos podido confluir es genial y me siento muy agradecida de que haya sido así”, afirmó.
En cuanto a los números musicales quedó claro que la ciudad, por el peso de sus referentes, es una de las cunas musicales del país y que “Rosario es el rocanrol”, como diría Popono de Los Vándalos, pero no sólo eso. Es pop, trap, hip-hop, jazz, reggae, heavy metal, electrónica, rock, blues, música clásica y más. La riqueza cultural es amplia, para todos los gustos, y siempre en movimiento: una urbe que bebe de sus propias tribus urbanas y de influencias musicales de todo tipo, generando una raigambre sonora propia.
La apertura de la presentación llegó a través de Raciatti y su set eléctrico (la vocalista estuvo acompañada por Denis Martínez en bajo, Manu López en guitarra y Nahuel Meiners en batería) que oficiaron de backing band para un ‘feat’ de alto vuelo con Pablo Pino, vocalista de Cielo Razzo, Los Bardos y Pino. La cantante y el frontman de Cielo Razzo se despacharon con una lograda reversión de “Tumbas de la Gloria”, uno de los clásicos de Fito Páez.
Minutos más tarde y con la temperatura en su punto óptimo llegó el turno de un dueto a puro funk sabroso con Chockenbici junto a Nahuel Marquet (Degradé, Los Bardos) para interpretar “Yo no permito”, originalmente compuesta por Litto Nebbia. Ani Bookx estableció un diálogo fino, musical y ameno con Marquet, mientras la base conformada por Lautaro Canals (batería), Juan Pablo Mariño (bajo, el Guillermo Vadalá-Victor Wooten-Flea- de este lado del Paraná) y el tecladista Mauro Giolitti edificaba un groove robusto que otorgaba flow y frescura.
Posteriormente, y con el pulgar hacia arriba de Mario “El Pájaro” Gómez, frontman de Vilma Palma e Vampiros, una de las bandas rosarinas for export y de las más importantes de Latinoamérica, Sidernova arribó al escenario para una expansiva versión de “Verano traidor”, junto a Tobías Paván, líder del grupo Bads. Lograda interpretación a dos voces y con corista femenina incluida. Más asincopada que la original, con dosis de pop, pero con intervalos más rockeros y un gran solo de guitarra a cargo del también vocalista Martín López de Vita.
Sobre el epílogo de la noche, Gallardo presentó en sociedad, y en pantalla grande, el tráiler de “Rosario canta una de…” que, a modo de resumen, dejó entrever la variedad y riqueza estilística cristalizada en los más de 120 músicos que participaron del ciclo hasta ahora. Fue el cierre perfecto para una velada en la que reinó el lema de “en la diversidad está el buen gusto”, y que demostró que a la cultura se la nutre y construye entre todas y todos.
“Rosario canta una de…”
En el primer capítulo se interpretaron 6 canciones de Fito Páez, que fueron grabadas en vivo en el salón Carrasco del Palacio Municipal, con un estudio móvil y una estética visual de alto nivel artístico. Posteriormente esos registros, tanto de audio como de video, fueron editados y postproducidos en los estudios Penny Lane y Broda, respectivamente.
Participaron Manu Piró y Flor Croci haciendo “Tres agujas”; China Roldán e Ike Parodi con “Giros”; Muñecas y Eugenia Craviotto con “Tráfico por Katmandú”; Mica Racciatti y Pablo Pino con “Tumbas de la gloria”; Yamile Baldón y su grupo Oh Happy band, junto a Gonzalo Aloras, haciendo “El amor después del amor”, y Patagonia Revelde con Mavi Leone se lucieron con “Parte del aire”.
La idea de este contenido es darle una nueva mirada a canciones que han trascendido generaciones y fronteras, con la fuerza y la identidad de algunos de los nuevos artistas que están surgiendo en esta ciudad, acompañados con referentes que lo vienen haciendo desde varios años atrás. Este primer capítulo fue emitido por Telefé Rosario, para luego estar disponible en YouTube.
El segundo capítulo está basado en la obra de otro gran compositor de esta ciudad, referente indiscutible del rock en castellano, Litto Nebbia. Participaron los siguientes artistas: Silvina Garré junto a Julian Venegas con “Solo se trata de vivir”; La Máquina invisible y Mantu Mantoiani, de Bulldog, con una magnífica versión tanquera de “La balsa”; Chokenbici con Nahuel Marquet hicieron “Yo no permito”; Luciano Jazmín junto a Mercedes Borrel con “Nueva zamba para mi tierra”, y Matilda con Ele Mariani interpretaron una versión del clásico “Viento dile a la lluvia”.
El tercer capítulo del proyecto se basó en canciones del exitoso grupo rosarino que gira por toda América, Vilma Palma e Vampiros. Los artistas y los temas interpretados son: “Auto rojo”, por Dani Pérez y Pau Soka; “Verano traidor”, a cargo de Sidernova y Tobías Paván, de Bad; “La pachanga”, por Cortito y Funky y el cuarteto Karé; “Bye Bye”, por Barfeye y Agustín Reyna (Bifes con ensalada); Girda y los del alba, con Elías y Mario “Pájaro” Gómez como invitado especial, hicieron “Fondo profundo”, y el Quinteto del túnel, con Luis Hermosín, de la Vanidosa y Roberta Bang con “Mojada”.
