A través de cuatro episodios, la serie original profundiza en el lado no conocido del fallecido multimillonario Ricardo Fort, además de su explosión en los medios, sus facetas de actor y cantante y la relación con su entorno y su familia.
Por Leo Deangelis
“El comandante Fort” es la nueva serie documental de Star Plus, que sigue la historia del origen, el ascenso a la fama y la repentina muerte de Ricardo Fort, el heredero multimillonario de uno de los imperios chocolateros más importantes de la Argentina, FelFort. Fue en la década de los 2000 que el adinerado hombre ganó popularidad por su excéntrico estilo de vida y su personalidad rebelde. Los cuatro episodios de la nueva ficción, se podrán ver desde este miércoles 25 de enero en la plataforma.
Ricardo Fort falleció en el 2013 luego de arrastrar varios problemas de salud. El empresario había forjado una enorme fama en Argentina y no solo por su acaudalada herencia sino por sus participaciones y su presencia inigualable. Se desempeñó también como actor y cantante, mientras que, a la vez fue considerado una figura mediática y controversial dentro de la farándula de su país.
Este relato íntimo de la vida de Fort invita a los espectadores a descubrir la historia detrás de este famoso que aún se mantiene vigente y la razón de su llegada a los corazones de la gente. Fue el ícono de una etapa de la televisión argentina que despertó intriga y atrajo las miradas de la opinión pública. A nueve años de su muerte, hay incluso generaciones más jóvenes que conocen demasiado acerca de él solo por lo que han escuchado de terceros.
“El comandante Fort” es una producción original de plataforma (Star Original Productions) que fue realizada por 20/20 Films. Patricio Álvarez Casado estuvo detrás de la creación del proyecto y, en la dirección, figuraron este mismo junto a Marcelo Burgos, Federico Luis Tachella, Nicolás Goldbart y Azul Lombardía.
Cada episodio de la docuserie retrata las fases más importantes de la trayectoria personal y artística de Ricardo Fort. El propósito de su lanzamiento al mundo es dar a conocer su dolorosa historia personal que estuvo marcada por los conflictos familiares y la lucha interna que experimentó por su sexualidad. Trasciende la figura mediática, lejos del enfoque de la prensa sensacionalista, para explorar los vínculos reales y cercanos que dejó tras morir.
Se incluyen entrevistas y testimonios exclusivos de familiares y amigos cercanos, imágenes inéditas y de archivo público. Entre las personas consultadas, figuran sus hijos, Marta y Felipe, su hermano Eduardo y Gustavo Martínez, su pareja más emblemática que falleció en el 2022. También participan Moria Casán, Graciela Alfano, Marcelo Polino, José María Muscari y Santiago Artemis, entre otros más.
“Su forma de vivir era una revancha”
La serie de Star Plus “El comandante Fort”, se plantea como una mezcla de documental y ficción en la que el cineasta argentino Patricio Álvarez Casado se propone bucear en los aspectos desconocidos del mediático heredero Ricardo Fort, que hizo de su vida un reality show. “Ricardo Fort no estaba preocupado por multiplicar su fortuna: gastaba todo su dinero en sí mismo y ese lado de mal millonario me parece atractivo para cualquier audiencia”, dijo Casado sobre la serie de cuatro episodios rodados entre Buenos Aires y Miami.
Para Eddie Fitte, el periodista a cargo de la investigación, la historia de Ricardo Fort es una suerte de “sueño del pibe global” ya que, tras la muerte de su padre, Felipe Fort, usó su parte de la herencia chocolatera para realizar sus sueños, esos que su progenitor no hubiese aprobado. “Su forma de vivir representaba una especie de revancha; de hacer lo que quería después de haberse sentido reprimido por la mirada de los demás durante años y decir ‘soy todo poderoso’”, agregó Casado, quien fue productor de “El último Elvis” y “Animal”.
Pero la inversión de esos millones al servicio de un ascenso meteórico a la fama es apenas la punta del iceberg del personaje mediático y ostentoso que a nueve años de su muerte sobrevive en forma de memes, frases icónicas como “Yo no manejo el rating, yo manejo un Rolls Royce”, “¡Basta chicos!”, “Meamaeee”) y merchandising.
Lo verdaderamente novedoso de esta serie es que ilumina una parte desconocida de su historia gracias a una investigación exhaustiva que derivó en la aparición de un diario íntimo inédito en el que Ricardo relata, entre otras cosas, su fracaso en la música y sus primeros amores. El programa cuenta con testimonios de los hijos de Ricardo Fort, Marta y Felipe, así como de su hermano Eduardo y de Gustavo Martínez, su ex pareja y tutor de sus hijos, quien murió en febrero de 2022 al caer de un piso 21.
“Lo que más nos interesaba era poder contar algo nuevo de una vida tan televisada que estuvo 24 horas por día, de lunes a domingo, en la pantalla. Y esa caja de pandora que fuimos abriendo generaron una versión de él que ni nosotros conocíamos, una especie de Ricardo nuevo”, comentó Fitte en una entrevista con Télam.
“Nos esforzamos por tratar de entender qué es lo que sentía y aparecieron conflictos familiares, la lucha por la identidad sexual, la necesidad de afecto y reconocimiento, que son problemas que tienen todas las personas. Creo que pudimos sacar a luz esa parte y nuestro sueño era que él pudiera hablar sobre sí mismo y cuando apareció el manuscrito no lo podíamos creer”, agregó Casado. “Teníamos los guiones escritos y tuvimos que reformular todo pero fue un placer que él pusiera en palabras su vida porque de esa manera no había nadie juzgándolo ni interpretándolo, era él hablando de él”, explicó.
En relación a cómo apareció ese material, Fitte dijo: “En vida, Ricardo fue un huracán que cuando murió dejó un montón de cartas documentos, resúmenes de tarjetas de crédito, vestuarios, archivos de Word y mails impresos en dos espacios que eran conservados tipo la tumba de Tutankamón. Nuestra obsesión eran esas cosas que nunca se habían vuelto a abrir y pudimos entrar cuando le llevamos esta idea a la familia con dos premisas que para nosotros eran fundamentales: ética periodística y calidad de producción”.
“Abrir esos espacios habilitó este no-género que tiene la serie porque es inclasificable como Ricardo y eso siempre me gustó porque soñábamos con hacer algo que a él le gustara y la no clasificación de género de la serie lo identifica”, sumó Casado, para quien “cuando empezaron a aparecer los trajes, el bastón de Juan Carlos Pallarols , que fue la única persona que no fue presidente que lo tuvo, los vestuarios, las escenografías” quedó claro que “ahí estaba la no narración y los disparadores para crear esta especie de homenaje de la familia”.
Los responsables de “El Comandante Fort”, hablaron además, del surgimiento de un “nuevo Ricardo” a partir de la investigación: “Entendí su vuelta al closet como víctima de la homofobia de esos tiempos, porque se le exigía salir del closet siendo padre de dos hijos de vientre subrogado cuando en la tele había una persona preguntándole a un homosexual si los hijos adoptados de un gay no corrían riesgos de ser violados, expresó Eddie Fitte.
El diario íntimo de Ricardo Fort
Poco antes de que se estrene la serie sobre su vida, las palabras de Ricardo Fort volvieron a los medios para correr el velo sobre su historia familiar. Sobre su padre escribió: “Me llegó a decir que prefería tener un hijo drogadicto a tener un hijo homosexual”. Centrada en la vida del recordado Ricardo Fort con la participación de sus propios hijos, Felipe y Marta Fort, tras un avance difundido, los herederos del mediático leyeron un texto que él mismo escribió acerca de su familia, su clase social y su propio padre.
“Empezaré diciendo que nací un 5 de noviembre de 1968 en Buenos Aires, Argentina, en una de las mejores clases de familia que podía haber elegido, o la peor, la de los ricos”, leyeron Marte y Felipe Fort en base al texto de la autobiografía que publicara hace más de 10 años su padre: “Mi padre fue un empresario exitoso, conservador, que solo se dedicaba a trabajar en su fábrica”.
“Mi madre, una mujer hermosa, con un carácter fuerte y una energía avasallante que desplegaba cada vez que entraba en algún lugar. Así comienza mi historia”, narra en primera persona, desde el más allá, el mismísimo Comandante, que pasó de ser una figura pintoresca en los programas de la tarde a ser valorado por el público como un showman y productor teatral.
Al ser heredero del chocolatero Felipe Fort, la predilección de Ricardo Fort por las artes escénicas y el mundo del espectáculo no encajaban en la estructura social a la que pertenecía, pero aprendió el valor del trabajo y el mérito. Por desgracia, más allá de lo laboral la relación de ambos hombres se volvió tensa, distante y áspera.
“No creía en mí como artista ni cantante. Cuando fallece fue un renacer de la persona que yo siempre quise ser”, reconoció Ricardo Fort en su autobiografía, donde también se refirió a la respuesta que Felipe Fort (padre) le dio cuando salió del clóset: “Me llegó a decir que prefería tener un hijo drogadicto a tener un hijo homosexual”, recordó.
