El primer trimestre cerró con un déficit de $689.927 millones. Cuántos ingresos se perdieron del sector agropecuario.
Las cuentas públicas tuvieron un mayor deterioro en marzo por el impacto del dólar soja, la sequía y la menor actividad. El balance entre ingresos y gastos arrojó un déficit primario de $257.856 millones, un aumento de 158,5% anual explicado por el desplome de la recaudación asociada a las exportaciones del agro, pese al ahorro por la caída del gasto en relación a la inflación.
En el primer trimestre, el rojo acumulado sumó $689.000 millones, incumpliendo por primera vez la meta fiscal desde el inicio del programa con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Para el primer trimestre, el tope previsto era de $440.000 millones (0,3% del PBI). Y en marzo, ya se había sobrepasado la meta de reservas, por lo que el Gobierno negocia ahora un “rebalanceo” del acuerdo con el organismo.
Durante el tercer mes del año, los Ingresos Tributarios del Sector Público Nacional ascendieron a $1.556.313,0 millones, lo que representó una suba del 77,3% interanual, ubicándose por debajo del incremento inflacionario para ese período.
Excluyendo los tributos al comercio exterior, el incremento de los recursos tributarios ascendería a 108,2% interanual, informó el Palacio de Hacienda.
El gasto primario alcanzó los $1.984.631 millones y presentó una suba interanual del 69%.
El gasto de capital se incrementó 146,2% interanual a raíz de la inversión en políticas sociales y en obras de infraestructura.
“Afectado por la grave sequía, la caída en tributos del comercio exterior del primer trimestre respecto a lo proyectado en el presupuesto fue de $350 mil millones”, dijo Economía.
En el marco de este escenario restrictivo, la administración de la política fiscal dispuesta por las autoridades del Ministerio de Economía priorizó las asignaciones financieras destinadas a jubilaciones y pensiones, a las políticas de inclusión social y a los programas de inversión pública con énfasis en la infraestructura energética.
Indicó que “la moderación sostenida para la ejecución del resto de los gastos presupuestados morigeró el impacto negativo en el resultado primario del período provocado por la referida caída de la recaudación. De hecho, la variación interanual real del gasto primario fue negativa (-6%)”.
Durante marzo, los ingresos totales del SPN alcanzaron los $1.726.776 millones, afectados por los tributos al comercio exterior.
Excluyéndolos, la recaudación tributaria presentó un crecimiento de +108,2%, mientras que, si se contemplan los mismos, esa variación alcanza el +77,3%.
En este sentido, los recursos asociados al mercado interno y a la seguridad social amortiguaron su desempeño.
Los ingresos correspondientes a los Aportes y Contribuciones a la Seguridad Social se aceleraron por tercer mes consecutivo (+110,6%), como consecuencia del aumento del salario medio del sector privado y sector público.
Estos ingresos se encuentran disminuidos por la exención que alivia la carga tributaria de las provincias del Norte Argentino y el sector de la salud.
Dentro de los ingresos ligados a la actividad económica, se destaca la recaudación correspondiente al IVA neto de reintegros (+$208.954,4 millones; +118,2%) la cual también se aceleró por tercer mes consecutivo, el impuesto sobre Débitos y Créditos (+$97.017,7 millones; +125,7%) y el impuesto a las Ganancias (+$78.355,8 millones; +102,5%).
Por su parte, los derechos de exportación evidencian una trayectoria diferente al resto producto de la grave sequía (-68,1% i.a; -$ 99.293,5 millones).
A su vez, las erogaciones primarias del Sector Público Nacional alcanzaron en marzo los $1.984.631,5 millones (+69%) priorizando durante el primer trimestre las políticas de inclusión social y la inversión pública en obras de infraestructura vivienda, transporte y con especial énfasis en infraestructura energética.
En lo que refiere a las prestaciones de la seguridad social de marzo, las mismas ascendieron a $745.573,3 millones (+91,1%).
Esta dinámica se explica por el impacto de la fórmula de movilidad vigente (Ley N° 27.609), que arroja incrementos conforme crece la economía y los salarios.
Este concepto no incluye el refuerzo de ingresos previsionales (+$79.000 millones), el cual también será otorgado para los meses de abril y mayo.
Por otra parte, la erogación asociada a remuneraciones alcanzó los $262.666,7 millones (+130,9%) producto de los incrementos otorgados en el marco de los acuerdos salariales alcanzados.
Las transferencias corrientes alcanzaron los $648.748,8 millones (+28,2%).
Aquellas correspondientes al sector privado presentaron un crecimiento de +$93.880,5 millones (+22,2%) motorizado principalmente por el gasto en Seguridad Social.
Entre ellas, se destaca el mencionado refuerzo de ingresos otorgado a jubilados y pensionados.
Al mismo tiempo, los subsidios económicos cayeron en -$78.657,6 millones (-35,4%), explicados por la dinámica de los subsidios energéticos, (-$90.041,5; -48,5%), pese a la compra anticipada de GNL. A su vez, aquellos subsidios relacionados al transporte crecieron en +$8.389,3 millones (+23,8%).
Por su parte, las transferencias corrientes al sector público realizadas durante marzo alcanzaron los $131.073,6 millones (+$48.836,6 millones), que incluye las transferencias realizadas por el Ministerio de Educación a las provincias en el marco del FONID por +9.825,3 millones (+134,9%).
El gasto de capital alcanzó durante el período de referencia los $168.649,3 millones (+146,2%), producto de la inversión asociada a obras de infraestructura energética, vivienda y transporte. En lo que respecta a Inversión Real Directa, la misma se incrementó en +$65.766,3 millones (+153,5%), destacando el gasto realizado por ENARSA (+$38.326 millones), para financiar la construcción del Gasoducto Néstor Kirchner.
Por su parte, las Transferencias de Capital a Provincias registraron un crecimiento de +121,4%, entre las que se destaca el incremento de las transferencias realizadas por los Fondos Fiduciarios para la Vivienda Social y de Integración Socio Urbana.