Por Leo Deangelis
La exposición se encuentra en el Museo de Ciencias Naturales Ángel Gallardo y abarca el período mesozoico (unos 260 a 60 millones de años AC.) Está recreada a partir de hallazgos paleontológicos realizados en la Patagonia por científicos y artistas
En estas vacaciones de invierno el Museo de Ciencias Naturales Ángel Gallardo (Moreno y Santa Fe) de Rosario recibe una espectacular muestra del museo itinerante Paleorama, de Don Torcuato (provincia de Buenos Aires). Se trata de una exposición de gigantes esqueletos que dan cuenta en tamaño real de los dinosaurios que habitaron hace millones de años estas tierras.
Para esto el equipo de Paleorama cuenta con copias y reconstrucciones de fósiles de la fauna prehistórica encontrada en Sudamérica, acompañadas de esculturas de reconstrucciones en vida, murales e ilustraciones del paisaje de nuestro país de ese periodo, así como materiales audiovisuales que acompañan las presentaciones.
Es un trabajo que reúne a científicos y artistas, quienes producen piezas que condensan detallados conocimientos científicos del campo de la paleontología, las artes plásticas y el patrimonio cultural de la región. A partir de una pieza encontrada, y por medio de investigaciones, se reconstruye todo el esqueleto del dinosaurio.
La exhibición está armada en tres momentos, determinados por la era mesozoica, que se divide en los periodos: Triásico, Jurásico y Cretácico. Así planteada, la exposición es una invitación a asomarse a la vida prehistórica, pero también a preguntarse sobre las teorías que explican la extinción de los dinosaurios.
En la misma se pueden ver ejemplares de Mapusaurus, Carnotaurus y un Amargasaurus en tamaño real. Belén Molinengo, investigadora del Museo Gallardo, destaca la importancia de tener este tipo de muestras en el museo que permiten “dar cuenta del importante trabajo de paleontólogos y arqueólogos”.
“En el Museo conviven tres muestras más, de manera permanente que buscan poner en relieve los actuales conflictos socioambientales e invitan a problematizar la realidad que acontece, como por ejemplo la muestra “Memoria Húmeda”, explicó.
En la planta baja del museo se encuentran las muestras. “Relatos, crímenes, territorios y gigantes” que tiene como eje central el ser humano y su ambiente, desde sus orígenes hasta la actualidad. “Historias en un pozo” plantea la reconstrucción del trabajo arqueológico desarrollado a partir de un hallazgo en el edificio de la actual sede de gobierno de Santa Fe, donde funciona el museo.
Y, finalmente, “Memoria húmeda” muestra el trabajo de investigación a partir del hallazgo de una vértebra de ballena mineralizada en las costas de Villa Gobernador Gálvez durante la bajante extrema del Paraná.
Uno de los puntos convocantes de la muestra que viajó grandes distancias para llegar al edificio de Santa Fe y Moreno, es la espectacularidad de sus fosiles. Se trata de copias realizadas por biólogos y artistas con la idea de divulgar los resultados de la investigación paleontólogica en Argentina
Además de sus dimensiones que resultan asombrosas, especialmente para los más chicos, es una invitación a asomarse a la vida prehistórica, pero también a preguntarse sobre las teorías que explican la extinción de los dinosaurios y a descubrir la vida prehistórica en diferentes épocas.
“Territorio de Gigantes”, no sólo tiene como objetivo mostrar una serie de reconstrucciones tamaño natural de fósiles de la fauna encontrada en Sudamérica, sino además de reflexionar sobre las formas de vida y los procesos ambientales, antiguos y actuales.
Durante las vacaciones de invierno, el museo abrirá al público de martes a viernes, de 10 a 19, y los sábados y domingos de 14 a 19 hs. Los recorridos se realizan por orden de llegada y el ingreso a la muestra “Territorio de Gigantes” tiene un bono contribución de 500 pesos.
Más allá de su impresionante belleza, la exposición trajo consigo, varias noticias alentadoras: es la primera desde que, en noviembre pasado, las filtraciones obligaron a suspender las visitas del público. Además, coincide con el vigésimo aniversario del devastador incendio que destruyó el 80% de la colección, los laboratorios y casi toda la biblioteca especializada en ciencias naturales del museo.
Otras muestras del Museo Gallardo
Por otra parte, en la planta baja del Museo de Ciencias Naturales Ángel Gallardo, hay otras tres muestras: “Relatos, crímenes, territorios y gigantes”, sobre la relación del ser humano con su entorno; “Historias en un pozo”, que reconstruye el trabajo arqueológico a partir de un hallazgo en el edificio donde se encuentra el museo; y “Memoria húmeda”, que exhibe la investigación basada en el descubrimiento de una vértebra de ballena mineralizada en las costas de Villa Gobernador Gálvez
“Relatos, Crímenes, Territorios y Gigantes”: Tiene como eje central el ser humano y su ambiente, desde sus orígenes hasta la actualidad. Se aborda el proceso de hominización mediante diferentes teorías que explican el surgimiento del Homo Sapiens y su dispersión por el mundo, las rutas migratorias y el poblamiento de América. La interrelación con la megafauna pleistocénica y los sitios arqueológicos que dan cuenta de esta convivencia entre animales de gran tamaño que habitaron junto a mujeres y hombres el territorio de la actual provincia de Santa Fe, hasta hace aproximadamente diez mil años.
“Historias en un pozo”: Un caso de arqueología urbana en Rosario: una estructura de ladrillos asentados en barro aflora en el suelo trás una época de fuertes tormentas y da comienzo a esta investigación, que hoy permite complejizar la historia de la actual Sede de Gobierno de la Provincia de Santa Fe, agregando nuevas capas de sentido.
“Memoria húmeda”: La bajante histórica del río propició el hallazgo de una vértebra de ballena mineralizada en las costas de Villa Gobernador Gálvez. Entre residuos plásticos, camalotes, paquetes de cigarrillos, latas y botellas, un pescador encontró meses atrás este resto fósil que nos vincula con el antiguo Mar Paranaense y las transformaciones geológicas de la región. ¿Qué historias narran estas otras materialidades; objetos camuflados en el barro?