Además, el presidente del país invadido por Rusia describió el 2022 como un año de resistencia, valor, dolor y unidad.
La guerra en Ucrania entró este viernes en su segundo año sin un final a la vista y el presidente Volodímir Zelenski se mostró desafiante mientras los dirigentes mundiales estaban dispuestos a imponer nuevas sanciones a Rusia y a los países que apoyan su esfuerzo bélico.
En un mensaje de vídeo, Zelenski dijo: “Somos fuertes. Estamos preparados para todo. Derrotaremos a todos”.
“Así es como empezó el 24 de febrero de 2022”, indicó sentado tras un escritorio y recordando cómo se dirigió a los ucranianos hace un año, mientras el mundo se tambaleaba por el acto de guerra iniciado por Rusia. “El día más largo de nuestras vidas. El día más difícil de nuestra historia reciente. Nos levantamos temprano y no hemos dormido desde entonces”, añadió.
Zelenski describió 2022 como un año de resistencia, valor, dolor y unidad. “La principal conclusión es que hemos sobrevivido. No hemos sido derrotados. Y haremos todo lo posible para ganar este año“, expresó.
Mientras arreciaban los combates en el este y el sur de Ucrania, sus aliados de todo el mundo mostraron su apoyo en el primer aniversario de la invasión rusa.
En París, la Torre Eiffel se iluminó con los colores azul y amarillo de la bandera ucraniana, y en Londres, personas envueltas en banderas ucranianas, con las manos en el corazón, se reunieron en una vigilia con una pancarta: “Si defiendes la libertad, defiende Ucrania”.
“Habrá vida después de esta guerra, porque Ucrania ganará”, dijo en un discurso la alcaldesa de París, Anne Hidalgo.
La Asamblea General de la ONU aprobó el jueves por abrumadora mayoría una resolución que exige a Rusia que se retire y ponga fin a los combates. Hubo 141 votos a favor y 32 abstenciones. Seis países se sumaron al voto negativo de Rusia: Bielorrusia, Corea del Norte, Eritrea, Malí, Nicaragua y Siria. China, aliada de Rusia, se abstuvo en la votación de la ONU.
El embajador adjunto de Rusia ante la ONU, Dmitri Polianski, tachó de “inútil” la acción en Naciones Unidas.
El ejército ucraniano informó de un aumento de la actividad rusa en el este y el sur a medida que se acercaba el aniversario y, al menos 25 ciudades y pueblos en tres regiones del norte a lo largo de la frontera rusa, se encontraban bajo fuego.
Reuters no pudo verificar estas informaciones sobre el campo de batalla.
El presidente ruso, Vladimir Putin, había ordenado una invasión a gran escala de Ucrania el 24 de febrero del año pasado para tomar Kiev y derrocar al Gobierno proeuropeo, pero esas esperanzas se vieron frustradas por una feroz defensa y por errores militares rusos.
Las contraofensivas ucranianas de finales de 2022 recuperaron gran parte del territorio perdido. Rusia controla ahora alrededor de una quinta parte de Ucrania.
Guerra en las trincheras
La guerra que Rusia describe como una “operación militar especial” para proteger su soberanía, se convirtió en una guerra de trincheras de desgaste, con crecientes pérdidas en ambos bandos, especialmente este año en los combates en la ciudad oriental de Bajmut y sus alrededores.
Algunos responsables estadounidenses y occidentales calculan las bajas rusas en casi 200.000 muertos y heridos, mientras que en noviembre el general de más alto rango de Estados Unidos dijo que más de 100.000 soldados de cada bando habían muerto o resultado heridos.
Es imposible verificar de forma independiente las bajas en lo que se convirtió en el peor conflicto en Europa desde la Segunda Guerra Mundial. Millones de ucranianos huyeron de su país y decenas de miles de civiles fallecieron.
Ucrania y Occidente acusaron a Rusia de crímenes de guerra, pero esta niega haber atacado a civiles.
La guerra perturbó la economía mundial y se instaló un clima de Guerra Fría en las relaciones internacionales, al tiempo que Putin invoca el fantasma de las armas nucleares y señala su deseo de agravar el conflicto, a pesar de las importantes derrotas en el campo de batalla.
Mientras Zelenski insiste en la retirada de Moscú, las perspectivas de paz parecen sombrías.
“No sabemos cuándo terminará la guerra. Pero lo que sí sabemos es que cuando la guerra termine, tenemos que asegurarnos de que la historia no se repita”, dijo el jueves a Reuters el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg.
“Tenemos que impedir que Rusia astille la seguridad europea”, añadió.
Apoyo a Ucrania
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, se reunirá virtualmente este viernes con los dirigentes del G7 y Zelenski para conmemorar el aniversario y anunciar nuevas sanciones contra quienes ayuden al esfuerzo bélico de Rusia.
El asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, dijo que Estados Unidos proporcionará 2.000 millones de dólares adicionales en ayuda y que las nuevas sanciones del G7 irán dirigidas a los países que tratan de suplir los productos que se niegan a Rusia debido a las sanciones.
Los dirigentes financieros del G20 reunidos cerca de Bengaluru, en India, deben condenar la agresión de Rusia contra Ucrania, dijo el viernes a Reuters el ministro francés de Finanzas, Bruno Le Maire, quien añadió que Europa estaba trabajando en nuevas sanciones contra Moscú.
“Las sanciones serán cada vez más eficientes, cada vez más eficaces”, dijo Le Maire en sus comentarios realizados el primer día de la reunión del G20.
India, que ostenta actualmente la presidencia del G20, no quiere que el bloque discuta más sanciones y está presionando para evitar el uso de la palabra “guerra” en el comunicado para describir el conflicto, según dijeron representantes del G20 a Reuters.
Estados Unidos ha afirmado que China está considerando la posibilidad de suministrar armas a Rusia, lo que podría intensificar el conflicto hasta convertirlo en un enfrentamiento entre Rusia y China, por un lado, y Ucrania y la OTAN liderada por Estados Unidos, por otro.
Putin saludó el jueves las “nuevas fronteras” en los lazos entre Moscú y Pekín y dijo que el líder chino, Xi Jinping, le visitaría. Se espera que Xi pronuncie un “discurso de paz” el viernes, aunque algunos analistas han puesto en duda que los esfuerzos de China por actuar como pacificador vayan más allá de la retórica.
El Ministerio chino de Asuntos Exteriores afirmó el viernes en un documento de posición que el diálogo y la negociación son las únicas vías posibles para resolver el conflicto.
Ucrania y sus aliados afirman que la invasión constituye una apropiación injustificada de tierras cuyo objetivo es subyugar a un Estado soberano.
Para aumentar aún más la tensión, Putin anunció el jueves sus planes de desplegar este año nuevos misiles balísticos intercontinentales con cabezas múltiples Sarmat. Esta semana, suspendió la participación de Rusia con Estados Unidos en el Nuevo START (Tratado de Reducción de Armas Estratégicas), sobre control de armas nucleares.