Amazon estrena la serie argentina “Barrabrava”, que expone la violencia y el poder de las hinchadas de futbol

Gastón Pauls regresa a la ficción de la mano del director de “Monzon” y, junto a Matías Mayer, componen a dos hermanos que luchan por sobrevivir en un difícil contexto social y económico en una trama tejida traiciones, ambición, amor, lujuria y violencia con el mundo del futbol como trasfondo

 

Por Leo Deangelis

 

Amazon Prime Video estrena “Barrabrava”, la ficción argentina que se mete en polémico mundo de los barras y que, además, marca el regreso de Gastón Pauls a la ficción. Dirigida por Jesús Braceras, el mismo realizador de la exitosa biopic “Monzón”, que emitió Space, la ficción está protagonizada además de Pauls, por Matías Mayer, quienes juntos componen a dos hermanos enfrentados por la falta de poder y protección tras ser expulsados de la hinchada del Club Atlético Libertad del Pueblo. La serie de 8 episodios, está disponible en la plataforma desde este viernes 23 de junio y propone un cóctel de fútbol, policial y esquema vincular.

 

En la serie, Pauls y Mayer son César y Polaco, dos piezas clave en el funcionamiento de la barra de Libertad del Pueblo (un equipo creado para la ficción) que, tras una agitada pelea interna, son marginados de sus roles por decisión del Tío (Garzón), el histórico líder de ese grupo. A partir de ahí, la vida de los hermanos se desmorona, no sólo porque se quedan sin dinero, sino que pierden el respaldo de la hinchada. Y desde esa baldosa el guión va construyendo una trama tejida con traiciones, ambición, amor y lujuria. ¿Se quedarán enfrentados para siempre? O ¿el amor, siempre, es más fuerte? La pincelada de lo vincular juega un rol fundamental en este relato que aborda la temática barra desde otro ángulo.

El elenco se completa con Gustavo Garzón, Liz Solari, Pablo Alarcón, Mónica Gonzaga, Miguel Ángel Rodríguez, Cande Molfese, Ángelo Mutti Spinetta, Violeta Narvay y el rapero Neo Pistea. Eva De Dominici hará una participación especial. La serie viene de la mano de una dupla conocida. Es que, si bien Braceras tiene un notable recorrido audiovisual, que se consolidó con la realización de “Monzón”, aquí su nombre se potencia porque vuelve a formar dupla con Pauls, luego de que trabajaran juntos en esa deliciosa comedia que fue “Todos contra Juan” (2008). Él era uno de los directores del unitario que emitió América.

 

En la campaña de prensa, Braceras confesó que uno de los motivos que lo llevó a involucrarse en este proyecto fue “haber sentido que el universo de violencia alrededor de los fanáticos de los equipos de fútbol no se ha mostrado todavía con profundidad y realismo”. Y otra de las razones pasa por la chance de volver a trabajar con el actor que estaba alejado de las ficciones y con quien había logrado contar, en aquella comedia de hace 15 años, un humor diferente, entre ácido y simple. Por otra parte, “Barrabrava” propone un mix de fútbol y familia.

 

El director, responsable también de la serie “Puerta 7” (2020), explicó que ésta “será la primera serie que ahonde en la intimidad de este universo a través de una familia, explorando sus dolores y carencias más íntimas”. Y agregó que “es en sus protagonistas y sus vínculos en quienes se centra el relato”. La ficción cuenta con el guión de Gabriel Nicoli, en colaboración con Diego Fió, Mariana Wainstein y Bruno Luciani. Habrá clima de cancha, de fútbol y de periferia de fútbol, con un buen reflejo de la pasión que rodea las canchas.

 

Y ya desde el título queda claro de qué va la historia, pero, amén del trazado de base que permite etiquetarla en determinado nicho de ficción, esta producción de Amazon busca contar algo más, que, prometen desde la plataforma, se irá consolidando a lo largo de los ocho episodios. “El fútbol es solo un pretexto, la traición es sólo un medio y el poder es sólo un objetivo”, dice el comunicado de la plataforma, para agregar, categóricamente: “Es una historia de hombres despreciados por el sistema, que encuentran un lugar de pertenencia y respeto en las gradas del estadio”.

 

El regreso de Gastón Pauls

 

A casi 30 años de su debut televisivo como actor, en Montaña rusa (1994, por el viejo Canal 13), Pauls retoma un oficio que nunca soltó del todo, pero en el último tiempo quedaba en un segundo plano detrás de su rol de conductor. Tras el boom que significó la serie juvenil en la que compartía cartel con Nancy Dupláa (él era Alejandro, ella era Mariana, una pareja que trascendió la pantalla y se instaló durante cuatro años en la vida real), Pauls hilvanó un trabajo tras otro.

 

Sus actuaciones fueron más como actor que únicamente como galancito, con títulos como “El Rafa”, “Tumberos” y “Soy tu fan”, entre otros. En “Todos contra Juan”, componía a Juan Perugia, un actor que intentaba recuperar la fama que había tenido hacía más de 20 años. La trama mostraba su costado más tierno y patético, capaz de hacer cualquier cosa por ser reconocido. Ese gran trabajo de Pauls (en el que Braceras fue uno de los directores) le valió el Martín Fierro a mejor actor de unitario y/o miniserie en 2009.

 

Pero su rol de entrevistador y conductor le fue compitiendo mano a mano al de actor y, desde 2003 con “Proyecto 48” (por TNT), fue construyendo una carrera sin personaje en paralelo, con “Pecados capitales”, “Mejor hablar de ciertas cosas” y “Seres libres”, ciclo en el que ha abordado su pasado con las adicciones, entre otras confesiones. En cine, se destacó por primera vez en “Territorio comanche” (1997), pero fue su participación en Nueve reinas (2000), de Fabián Bielinsky.

 

Ese film, le dio reconocimiento internacional y el premio de mejor actor en Biarritz y, posiblemente donde Gastón Pauls mostró lo mejor de su talento a la hora de la actuación. Posteriormente, Pauls siguió cosechando películas exitosas como “Iluminados por el fuego” (2005), “Fuga” (2006), “Che 2ª parte: Guerrilla” (2008) “Días de vinilo” (2012) y “Días contados” (2017) entre otras. Ahora, el actor regresa a la ficción, con “Barrabrava”, con un nuevo personaje que le permite bucear en su versatilidad actoral.

 

“Un universo que había que explorar”

 

A cuatro años de la reconocida serie biográfica “Monzón”, el realizador Jesús Braceras vuelve al formato chico con Barrabrava, propuesta dramática que llega a Amazon Prime Video este viernes, abordando “un universo que había que explorar” poniendo el foco en lo humano y evadiendo los juicios de valor. Así lo aseguró a Télam el director y showrunner, de cara al estreno de la tira, que si bien les permitirá a los espectadores “salir entendiendo cómo funciona” el entramado común de estas organizaciones insertas en el terreno del fútbol, que desde tiempos inmemoriales son objeto de debate público en Argentina, “lo que se va a ver es a las personas” detrás de la etiqueta.

 

Braceras, suma así a “Barrabrava” a su lista de producciones, siguiendo bien de cerca a los personajes que lo navegan y en busca de alejarse de la dicotomía entre “buenos” y “malos” y de la reproducción de los abundantes estereotipos que pululan a su alrededor. Para eso, la narrativa se ancla en los roles principales de Polaco y César, dos hermanos de alto rango en la barra del ficticio Club Atlético Libertad del Puerto, que funciona bajo las órdenes del Tío, el veterano líder de la facción interpretado por Gustavo Garzón.

De dimensiones muy distantes a las de cualquier “grande” del fútbol local, aunque no por eso menos corrupta, la estructura operativa que mete bocado en cada área y decisión del club está hace años bajo ese dominio indiscutido. Sin embargo, un imprevisto error de cálculo tanto en el vestuario como en la cancha, cargado de consecuencias problemáticas, se transforma en la oportunidad ideal para dar paso a la traición y dar vuelta por completo el panorama.

 

Ahora, expulsados de su principal entorno de pertenencia tras la explosiva interna, la dupla de hermanos buscará, sin protección ni recursos económicos, pero a toda costa, la manera de recuperar su espacio y “volver a su medio de vida y a sus propias vidas, con todo lo que los rodea, con sus seres queridos”, explicó Braceras, aunque eso desate una verdadera contienda con su comunidad de siempre. Mientras, con ese conflicto como telón de fondo, el hilo conductor de aquello que une y pone a prueba a los protagonistas será alimentado por inquietudes personales, desde el terreno de lo romántico y el deseo hasta el de lo familiar y lo identitario, que marcarán el devenir de su desventurada aventura en un escenario marcado por la violencia.

Con un logrado trabajo de producción, que va desde la confección completa de la estética y los símbolos del imaginario club hasta la convocatoria de decenas de hinchas reales para construir el clima de la tribuna a la hora de rodar, Braceras dijo sobre “Barrabrava”: “Es un tema de estudio que me interesó siempre, me parece un fenómeno único del mundo por su intensidad cultural, con la que se llevan adelante los cantos y la organización en cuanto a los festejos y también en cuanto a todos los entramados y negociados que hay detrás, que está en casi todos los clubes, la verdad que es único y viene desde hace muchísimo tiempo”, sostuvo sobre la idea inicial.

 

A su vez, relató cómo fue construyendo ese mundo para la ficción: “Me relacioné con barras de diferentes clubes y con periodistas especializados, porque básicamente lo que más me interesaba contar es a las personas detrás de este fenómeno barrabrava. Es una historia de personajes, de vínculos y de familia, tiene que ver con sus historias personales, y cómo las pérdidas de poder o el estar dentro o no de una barra los afectan en su día a día. Y también intenta entender el porqué de esta vinculación y lo que les pasa a los miembros de una barra. Esta serie no sería lo mismo si fuese sobre una mafia en Chicago, porque la dinámica de una barra es diferente, la pasión es diferente”.

En tanto, siendo un tema presente desde hace décadas en el periodismo y la discusión pública, el director también habló sobre qué mirada propone la serie sobre las barras y si piensa que va a despertar algún tipo de conversación: “No, la serie sí va a generar conversación, pero no toma partido. Cuando tus protagonistas son miembros de una barra efectivamente estás metiéndote, pero no los juzgamos, no intentamos dar una bajada de línea. A través de los personajes mostramos cómo funcionan estas organizaciones, sí, vas a ver que los protagonistas obran por fuera de la ley, que ven en la violencia un medio para conseguir sus objetivos, pero no si eso está bien o está mal”.

 

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