Lo admitió en diálogo con LT 3 Andrés Gariboldi, presidente del Colegio de Corredores Inmobiliarios de Rosario
Gariboldi explicó además que, en el último informe elaborado por la institución, se registró que hay alrededor de 54 mil inmuebles en venta y menos de mil en alquiler.
Esto supone un problema importante para la ciudad, puesto que la demanda de inmuebles en alquiler supera ampliamente la oferta disponible, lo que implica una dificultad para familias y estudiantes que quieran radicarse en Rosario o mudarse dentro de la jurisdicción; además, al haber pocas opciones, los precios tienden a subir.
El empresario señaló además que, para atender a la demanda, las inmobiliarias hoy día utilizan listas de espera y, mientras en 2019 los inmuebles tardaban entre 90 y 120 días en alquilarse, hoy se alquilan de forma casi inmediata.
Según el dirigente, el estudio del mercado arrojó que aproximadamente el 30 por ciento de los inmuebles disponibles cambió del rubro alquiler al rubro ventas y apuntó al “efecto negativo” de la ley de alquileres.