Los primeros episodios de la precuela de Game of Thrones causaron sensación en todo el mundo.
Luego del éxito de las ocho temporadas de Game of Thrones y el tropezón que representó el final de la adaptación audiovisual de los libros de George R. R. Martin, House of the Dragon reavivó el fanatismo de miles de televidentes por el universo creado por el escritor estadounidense. Y el final de la primera temporada dejó al público con ganas de más.
Para tranquilidad de muchos, HBO anunció la renovación de la ficción el 26 de agosto, a pocos días del debut. Y según reveló el sitio Variety, el rodaje comenzará recién a principios de 2023, con Emma D’Arcy en la piel de Rhaenyra Targaryen, Matt Smitt como Daemon Targaryen y Olivia Cooke como Alicent Hightower, entre otros.
Eso sí, todavía no está claro cuándo será el lanzamiento de los nuevos episodios. Ya que se llegó a barajar la posibilidad de que fuera en 2023, pero dado el trabajo de post producción que requieren, también se especulaba con que haya que esperar hasta 2024. Pero lo más importante es que la primera entrega marcó el punto de partida para una importante guerra por el Trono de hierro.
De qué trata House of the Dragon
La historia parte de una encrucijada en la que se encuentra el Rey Viserys Targaryen, quien debe decir quién será su sucesor o sucesora en el trono de hierro. En principio, tiene dos opciones: la princesa Rhaenyra Targaryen (Milly Alcock y Emma D’Arcy), su primogénita, o su hermano menor, el Príncipe Daemon Targaryen (Matt Smith).
Y mientras la joven presenta todas las cualidades necesarias como para liderar el reino, el hecho de ser mujer le juega en contra; mientras que su tío se destaca como un buen representante de su casa, pero su temperamento -al igual que el de muchos de sus ancestros- no termina de convencer a Viserys.
En el mundo que creó Martin, los Targaryen resaltaban por tener pelo blanco, ojos violáceos y contar el don de dominar a los dragones, pero con el paso del tiempo el rasgo más característico de la familia fue la locura y la afición por el fuego. “Locura y grandeza son dos caras de la misma moneda y cada vez que un Targaryen nace, los dioses lanzan la moneda al aire y el mundo aguanta la respiración para ver de qué lado caerá”, decía el Rey Jaehaerys II sobre su propio clan. Y esta dualidad se presenta a la perfección en Daenerys, la única sobreviviente de la casa, en las últimas temporadas de GOT, en las que demuestra todo lo que es capaz de hacer para estar al poder y recuperar el trono que le perteneció a sus ancestros.